miércoles, 19 de octubre de 2011

Cambia de estilo cada día, rompe la rutina sin saber que camino elegir. Escoge los colores de la ropa sin mirar. 
Camina hacia atrás, pero siempre avanza. Consigue ser diferente sin que nadie la critique, y pensar que todos somos como ella. Retrocede en sus pensamientos para ver que mal lo ha pasado antes y que bien está ahora. Es capaz de desayunar cada mañana , a las ocho, y sin ningún complejo comerse dos rebanadas de pan con nutella, una taza de chocolate y lo que se le venga en gana, mirará lo que pesa en su báscula y será feliz porque pese algo más y siga igual de bien. No es capaz de compenetrar pies y cabeza, manos con hombros pero nada importa para no asistir a una clase de aeróbic matutina. Y al sonreír, se puede dar cuenta de que es única,diferente y feliz.







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